Recupera tu sonrisa de forma segura y duradera con implantes dentales de calidad
Los implantes dentales son pequeñas piezas de titanio que se colocan en el hueso maxilar para sustituir la raíz de un diente perdido. Sobre ellos se coloca una corona dental que imita la forma, el color y la función de un diente natural.
Si has perdido uno o varios dientes, los implantes dentales son la mejor solución para recuperar estética, comodidad y funcionalidad.
Ofrecemos tratamientos de implantología convencional, incluso en casos complejos donde es necesario regenerar hueso o realizar una elevación del seno maxilar.
Este tratamiento está recomendado cuando:
Tratamientos con seguimiento personalizado, para que te sientas seguro en cada paso
Revisamos tu caso y realizamos una radiografía 3D (CBCT) si es necesario
Diseñamos un tratamiento a tu medida
Procedimiento sencillo y con anestesia local
El implante se une al hueso (de 2 a 4 meses)
Recuperas estética y funcionalidad
Estaremos encantados de atenderte en una primera visita informativa y sin compromiso.
Un implante dental es una raíz artificial de titanio que se coloca en el hueso para reemplazar un diente perdido. Se recomienda cuando falta uno o varios dientes y se busca una solución fija, duradera y estética.
El tratamiento se realiza en varias fases. Primero se hace un estudio personalizado y una radiografía 3D. Después, colocamos el implante mediante una pequeña intervención con anestesia local. Una vez el implante se integra en el hueso (de 2 a 4 meses), colocamos la corona definitiva.
Con buenos hábitos de higiene y controles periódicos, un implante puede durar más de 20 años. Es una de las soluciones más duraderas en odontología.
No. La cirugía se realiza con anestesia local y es indolora. Después, puede aparecer una leve molestia o inflamación, pero se controla fácilmente con analgésicos.
En casos de pérdida ósea, existen técnicas como el injerto óseo o la elevación del seno maxilar que permiten regenerar el hueso y colocar el implante con seguridad.
Sí, pero antes es necesario tratar y estabilizar la enfermedad periodontal. Una vez controlada, podemos valorar el tratamiento con implantes.
Los implantes no dañan dientes sanos, preservan el hueso, ofrecen una mayor estabilidad y mejoran tanto la estética como la comodidad. Son la opción más similar a un diente natural.